lunes, 4 de diciembre de 2017

Relato corto : papaya - Cuando faltaba muy poco para que yo cumpliera la mayoría de edad y se iban a celebrar los juegos olímpicos mi familia decidió matar mi futuro y que dárselo. Para eso iban a drogarme y Sacarme unas fotografías desnuda en misma, la cama donde yo dormía desde mis nueve años de edad. Por entonces yo iba al instituto. Mi padre biólogico se enteró y me hizo llegar un mensaje con pocas palabras : yo con esto no estoy de acuerdo. Te voy a ayudar. Ve mañana a la asistenta social. - por lo visto lo que él no quería era el escarnio público. A mi ya me debían haber sacado fotografías antes en mi casa pero esto que iban a hacer ahora era diferente y a nivel mundial. Yo me sentí muy bien y le dije a mi hermanastra frutera que me acompañara al día siguiente y ella me vendió. Si mi padre biológico quería que yo hubiera tenido éxito debió informarme al día siguiente cuando yo iba de camino al instituto, camino que pasaba por la oficina de la asistenta social. Mi hermanastra me vendió a mi madre y al día siguiente ya no me acordaba de nada al levantarme. Por aquel entonces la radio decía que a las francesas sus madres las echaban pastillas anticonceptivas en la comida y las hijas como a su vez las tomaban a escondidas de sus madres, acababan con sobredosis de medicamento, y a mi me debían echar antidepresivos, que duermen y afectan a la memoria a corto plazo. Mi madre me dijo una vez por aquel enronces que ella veía lo que yo veía pero no me dió explicaciones cuando se las pedí. Después me sacaron las fotografías, estaban los 4 riéndose en la habitación mientras lo hacían, ya lo conté anteriormente. Después el médico me hizo llegar otro corto mensaje. No voy a volver porque la familia ha decidido que no podemos hablar contigo. - más que por las palabras fué por el tono que deduje que esa persona vivía en un mundo de cuento de Jane Eyre en el siglo 19 cuando en realidad estábamos a finales del siglo XX. Es curioso pensar en que en un año antes compañeros del instituto intentaron ayudarme pero él no quería, y esos compañeros me lo dijeron, también lo he contado ya, y medio año después otra gente me indicó que fuera a la asistenta pero eso tambien meblo quitó el mismo.

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